El domingo pasado leía en el periódico CincoDías un artículo de Paz Álvarez "Fórmulas para implicar a los equipos en la empresa" acerca de como conseguir que el personal de una empresa se sienta partícipe de ella, en él se hablaba del caso que está sufriendo el Real Madrid Club de Fútbol, realizando similitudes con el trabajo que se realiza en distintas empresas.
Una de las personas que habla sobre este tema es Isidro Fainé, Director General de la Caixa: "Para conseguir esa implicación es necesario, saber dirigir la voluntad de las personas. Porque éstas son una 'realidad compleja y como tal hay que afrontarla en la gestión del proyecto y del equipo que lo lleva a cabo'. El compromiso, es un paso más allá en la motivación. 'Orientar a las personas hacia proyectos es un primer paso para disponer de equipos y no de meros grupos. Con una meta común, hay que ilusionar para que todos aporten su mejor grano de arena para conseguir el objetivo'".
Estoy muy deacuerdo con las palabras de Isidro, recalca la importancia de dirigir la voluntad de las personas, algo muy complejo ya que los seres humanos somos un sistema complejo, cambiante y turbulento difícil de predecir. En lo referente al compromiso , tiene toda la razón, es algo más que motivar, es hacerlos partícipes de un proyecto propio, personal, a la vez que se hace común, para que como he comentado en algún que otro post, se consiga el Objetivo final,que concuerda perfectamente con la opinión de Camilla Hillier-Fry, directora de PeopleMatters "Se trata de alinear metas empresariales y personales." ese es el secreto del éxito de una organización, pero conseguirlo no es tan fácil.
"El compromiso es algo que buscan las organizaciones que persiguen mayor desempeño y competitividad. 'Lo necesitan las empresas que necesitan ser punteras'", explica el socio director de Mind Value, José Aguilar "para sobresalir, lo primero que hacen es fichar a los profesionales mejor cualificados", pero tener al mejor, no te asegura el éxito, tu puedes formar un equipo de personas muy bien cualificadas para su trabajo, pero que no busquen el objetivo común, únicamente el personal, por lo que nunca se alcanzará el éxito de la organización, por esa razón hay que coneguir la máxima implicación profesional, es decir buscar el compromiso.
Una vez una persona ha alcanzado el éxito, hay que mantenerle presente en todo momento cuales han sido los pilares que le han permitido conseguirlo, que como siempre me ha dicho mi padre son: esfuerzo y trabajo en letras mayúsculas, si las personas más cualificadas se olvidan de esto, nunca se podrá alcanzar el objetivo común de la organización, y ninguna acción motivadora, podrá causar efecto en la persona, y menos, mantener su compromiso.
Un saludo, Phoenix.
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