
Según me contaron compañeros de Luis, el día anterior a mi llegada no podían ir en bicicleta, ya que lo mas posible era recrear la película de ET, a mi llegada no ví ningún resto lo único este árbol en el suelo , pero poco más.

Aunque parezca mentira, no tuve problemas para hacerme entender en Holanda, ya que la mayoría de los Holandeses hablan perfectamente Inglés y son muy serviciales. Llegue al aeropuerto bastante tarde, por lo que cuando me dispuse a coger un tren directo a Eindhoven, ya no había, gracias a Dios, dos personas me comentaron que había un tren a Utrecht y de allí podía coger otro a Eindhoven vía Hertogenbosch.
Cuando llegué, Luis estaba esperando y lo primero que me llamó la atención fueron, los cientos y cientos de bicicletas que había, era algo increible, las ciudades están pensadas para ellas y la verdad es muy divertido, a la vez que haces ejercicio. En próximos post os contaré grandes curiosidades de ese país.
Un saludo, Phoenix.
No comments:
Post a Comment